miércoles, mayo 31, 2006

Una bomba de relojería

La inmigración ha aterrizado finalmente en el debate político en nuestro país, en toda la Unión Europea y también en Estados Unidos. Las circunstancias son distintas en cada sitio pero el denominador común es la dificultad de manejar social y políticamente la llegada inesperda y masiva de cientos de miles de personas que parten hacia un horizonte vital más digno sin saber lo que arriesgan y los problemas que crean en las tierras de acogida.

Cuando se producen estos trasiegos humanos masivos, en estos momentos hay en el mundo doscientos millones de ciudadanos huídos de su patria, no es un problema local o regional sino un signo de inestabilidad global que genera inseguridad en los puntos de salida y de llegada.

En España se han aprobado varias leyes de inmigración y se han regularizado a cientos de miles de ilegales. Y a pesar de ello la marea de extranjeros sigue arrojando de forma vergonzante a miles de subsaharianos en las playas canarias y por las fronteras terrestres y aeropuertuarias se cuelan a diario centenares de clandestinos que se convierten en ilegales.

La primera obligación de los gobiernos es controlar las fronteras del estado. Tienen la facultad y deben disponer de los medios. Ni este ni el anterior presidente lo han sabido hacer. ¿Qué gobierno puede repatriar a medio millón de ilegales? Es imposible. Lo que sí podía haber hecho es impedir que llegaran estableciendo cotas y garantizando una inmigración ordenada. Ya era hora que la Unión Europea se diera cuenta de que las fronteras españolas son también las europeas.

No se ha cumplido con este requisito indispensable y tampoco se ha hecho la suficiente pedagogía para trasladar a los recién llegados que pueden gozar de todos los derechos pero tienen también que cumplir los mismos deberes que nosotros. Una sociedad que tiene en su seno a cientos de miles de ciudadanos indocumentados, ilegales, corre el riesgo de que se disparen todas las alarmas de la inseguridad y que el miedo se apodere de las gentes como se ha demostrado en las comarcas tarraconenses en los últimos días.

Ni éste ni el anterior gobierno han actuado con responsabilidad en gestionar el fenómeno inmigratorio. Lo más inquietante está por llegar. Tienen los derechos sociales y pedirán los políticos. Surgirá la xenofobia y nacerán partidos extremos. Si se hubiera actuado responsablemente a tiempo se podría haber desactivado la bomba de relojería que tenemos en las manos. Ojalá no sea demasiado tarde

17 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué fronteras, Sr. Foix? Ya sabe bien que actualmente no existen.
Soluciones: Que la Armada se distribuya convenientemente y hunda a cañonazos toda aquella embarcación que se dirija rumbo a costas españolas. (Siempre que se cercioren de que está atiborrada de negritos muertos de hambre; no vaya a ser que se carguen algun yate de posibles o probables residentes en la Costa del Sol).
En el aeropuerto de Barajas y en la "frontera" con Francia que no dejen pasar ningún pasajero sin revisar, uno a uno, su documentación.

BartolomeC dijo...

Sr.Foix: Elevar la valla de Melilla tres metros parecía la gran solución, elevar las islas Canarias tres metros va a ser más dificil.
Las inmigraciones han sido una constante en la historia de la humanidad, la mayoría de los paises actuales no existirian sin ellas, España era arabe hace apenas mil años, en Moscú no habia un ruso, en Turquía no habia turcos y muchos paises europeos(Estados Unidos también) no existirian en su configuración actual sin esas inmigraciones que ahora tanto nos inquietan.
Comparto su preocupación por este éxodo descontrolado y sus consecuencias, por esta falta de previsión que a no dudar cambiará la configuración de nuestras sociedades(ya está sucediendo).
No somos un pais que como Israel,Canadá o Australia necesite imperativamente la inmigración para su supervivencia, tampoco nos ha venido mal este nuevo aporte de trabajadores, lo que pienso que ha fallado es la ordenación y estructuración de este importante flujo de personas, pero eso Sr.Foix no nos compete a nosotros hacerlo, es responsabilidad de nuestros gobernantes, es otra de las responsabilidades que no han sabido gestionarnos.

Anónimo dijo...

Los primeros interesados en una inmigracion controlada son los que inmigrantes que ya viven en Espan~a. Los nuevos inmigrantes compiten directamente con antiguos inmigrantes en el terreno economico (buscaran trabajos parecidos) y en el social (pues su acceso a sanidad y educacion sufriran). Y quizas tambien en el terreno politico si aparece el fantasma de la xenofobia.

Creo que esto podria posibilitar el apoyo de los inmigrantes a una politica de fronteras mas estricta. Siempre que los derechos politicos esten fuera de discusion, claro.

Anónimo dijo...

///ENRIC///



Ya se ha visto que levantar vallas no es la solución, de lo de levantar tres metros las islas Canarias ni hablemos, es una frase que resume como pocas la ineptitud de levantar muros. En Estados Unidos quieren levantar cientos de kilometros para mirar de parar la avalancha de inmigrantes mexicanos, son los mismos inmigrantes ya legalizados quienes tienen más interes en que no les lleguen nuevos competidores, cuando la situación económica se deteriore entonces sabremos en verdad la verdadera dimensión de tener tantos inmigrantes en tan poco tiempo.

Anónimo dijo...

Ya es demasiado tarde.

Guillem Carbonell dijo...

En un món:
- sense distàncies (transport, comunicació i cada vegada més punts de referència en comú)és impossible aturar aquest procés.

- amb una diferència econòmica tant brutal entre països (alguns veïns i d'altres llunyans)

... és impossible aturar aquest procés. S'ha de regular en la mesura que es pugui però no el podrem aturar.

I no ens enganyem, la gran majoria dels immigrants no entren en pateres, arriben en avió.

Anónimo dijo...

Es cierto que la gran mayoria de los inmigrantes llegan en avión, pero llegan con un visado turistico que al caducar permite legalmente devolver a sus paises a estos inmigrantes.


Los inmigrantes que llegan en pateras dicen venir de paises con los que no existen acuerdos de extradición, con lo cual el problema mayor lo crean estos inmigrantes.

La natural reunión de inmigrantes de un mismo pais en pueblos o barrios, está fomentando el nacimiento de grandes guetos que funcionan idependientes del resto de la sociedad en la que viven.

Josep Vilá.




Josep Vilá.

Anónimo dijo...

"Ni éste ni el anterior gobierno han actuado con responsabilidad en gestionar el fenómeno inmigratorio. Lo más inquietante está por llegar. Tienen los derechos sociales y pedirán los políticos. Surgirá la xenofobia y nacerán partidos extremos. Si se hubiera actuado responsablemente a tiempo se podría haber desactivado la bomba de relojería que tenemos en las manos. Ojalá no sea demasiado tarde."


Lluis, me gustaría que te eqivocases, pero me temo que has dado en el clavo.

´´ dijo...

El problema no son los inmigrantes son los nacionales , esto de que un pais es tuyo y no dejas entrar a la gente me suena un poco raro , cada uno hace lo que puede y aqui se vive muy bien de la plusvalia del tercer mundo , pero que no vengan , somos unos cinicos del copon.

Anónimo dijo...

¿Los nacionales o los nacionalistas...?

Anónimo dijo...

Dear friend,The tick tack keep running! I hope your wise words are heard soon.
As you said it, here is not,"DO NOT come to live with us;" there are other factuals points that shallow people are unable to perceive at first sight.
We are in the same boat. Good luck!
With all my respect and admiration.lil

´´ dijo...

los nacionales

Anónimo dijo...

OK

Anónimo dijo...

Entre la Edad Media y el siglo XVIII, Catalunya quedó prácticamente despoblada en al menos dos ocasiones. Se repobló con gentes venidas de todas partes del Mediterráneo occidental y la Europa del sur, al punto de que, por ejemplo, se calcula que el 25%
de los apellidos "catalanes de toda la vida" son de origen francés. Y ello por no hablar de la emigración peninsular, masiva ya en el desde el siglo XIX: en 1900, uno de cada cuatro barceloneses tenía un abuelo aragonés. Luego llegaron las oleadas de mediados del siglo XX, y así hoy tenemos entre un 50 y un 60% de catalanes que son de origen inmigrante en primera o segunda generación. Y desde hace unos pocos años, llega la inmigración latinoamericana, africana y asiática: entre un 10 y un 15% de los residentes en Barcelona ciudad ya son extranjeros, la gran mayoría provenientes del Tercer Mundo aunque también residen aquí decenas de miles de europeos comunitarios.

En definitiva ¿de qué estamos hablando, cuando hablamos de inmigración?. A fin de cuentas todos somos inmigrantes, desde que nuestros primeros antepasados salieron de Africa no hace tantos miles de años.

¿Debemos obstaculizar el asentamiento de los inmigrantes en nuetra sociedad? Sería como amputarnos a nosotros mismos, a nuestro propio pasado. Y además, les necesitamos, obviamente: si vienen es porque aquí hay posibilidades de trabajo que si ellos no ocupan, nadie va a ejercer. Esta sociedad necesita inmigrantes, muchos más de los que hay. ¿Cuántos? Los que hagan falta: el fenómeno se regulará por sí mismo, recuerden lo ocurrido con la inmigración peninsular a Catalunya y cómo desde mediados de los setenta cesó espontáneamente, cuando aquí ya no eran necesarios nuevos aportes y paralelamente se fueron abriendo oportunidades en las zonas tradicionalmente de emigración.

Anónimo dijo...

Por cierto, estimado señor Foix: su apellido es indudablemente occitano. Me apostaría con usted una paella en Set Portes a que hubo un antepasado Foix que llegó a Catalunya sin papeles, como tantos otros.

Anónimo dijo...

Lo que se está planteando aquí es el modelo de inmigración, la forma de llegar, los abusos, las transformaciones sociales que producirán, saber si nuestra sociedad está preparada para esta avalancha.


Pere.

Anónimo dijo...

Estimado Lluís Foix:
¿Por qué será que muchas veces, cuando leo sus magníficas columnas relacionadas con temas de este otro lado del mundo y de Europa, me parece estar leyendo algo que yo escribí, o estoy por escribir? ¿Será porque tenemos una misma visión de la vida, del cosmos, del universo, de los seres humanos? Perdone mi atrevimiento por esa comparación. La suya es una de las mentes más claras que he tenido el privilegio de conocer, aunque sea por Internet. La estupenda columna de los políticos y los ideólogos estuvo formidable. Gracias por compartir con nosotros, simples mortales, sus ideas y sus pensamientos. Con admiración, Sonia, de Puerto Rico