viernes, septiembre 07, 2007

Iraq y la opinión mundial

Dado que nos movemos en democracias de opinión, democracias globales de opinión, la encuesta realizada en 22 países por la BBC debería tener algún efecto.

Casi un 40 por ciento de personas piden la retirada de las tropas de Iraq. Un 28 por ciento se decantan por una retirada gradual y el resto piensan que lo mejor es que se queden hasta que esté más o menos controlada la situación.

Digan lo que digan las encuestas, la presencia militar extranjera en Iraq durará tiempo, mucho tiempo. No en las dimensiones actuales. El número de tropas norteamericanas en presencia en Iraq es de 168.000, el más elevado desde la invasión en marzo de 2003.

Más de cuatro años después de la invasión, controvertida y apresurada, construida sobre un pretexto falso, una mentira, sin eliminar el terrorismo y sin promover la convivencia y la democracia en Iraq, lo más procedente sería una retirada gradual.

Pero la presencia militar de Estados Unidos en la región continuará de una forma o de otra. Irán está al lado, Israel también y Rusia pretende volver a ser decisiva en Oriente Próximo y en el mundo. Y hay mucho petróleo en juego.

3 comentarios:

´´ dijo...

Hombre Foix lo de democracias de opinion es un concepto algo raro . Hay democracias y hay opiniones , pero tambin hay elecciones , partidos y programas , no nos saltemos los pasos .

Anónimo dijo...

Sr Foix:Si en vez de petróleo hubieran patatas no estariamos hablando de guerra.Triste y lamentable pero real.Un saludo

BartolomeC dijo...

Sr.Foix:“Usted ponga las ilustraciones, yo pondré la guerra”,eso fue lo que William Randolph Hearst le contestó al ilustrador que había enviado en 1.898 a Cuba, Hearts quería una guerra y la tuvo.“Todo está en calma. No habrá guerra. Quiero volver”,rezaba el telegrama que le había cursado el pobre e ingenuo ilustrador.“El Maine partido en dos en La Habana por un infernal artefacto del enemigo”fue el titular de entonces, la ilustración de la portada del New York Journal es digna de Julio Verner y la recompensa de 50.000 dólares para quien aportara datos una jugada maestra de Hearst.
Ahora en Iraq las cosas han cambiado a peor, las ilustraciones y la guerra las ponen los mismos y sin ruborizarse lo más mínimo,las recompensas por la cabeza de Sadam and company son señal que Hearst creó escuela.


Pd/Africa: muchas gracias.