viernes, abril 20, 2007

Tengo una pregunta para usted

Les parecerá extraño pero no he visto ni a Zapatero ni a Rajoy en el programa de éxito del momento. Tengo una pregunta para usted es seguido por millones de españoles. Cien ciudadanos interrogan a una figura pública que tiene que responder a las preguntas populares.

He leído las crónicas de los dos interrogatorios. Del primero me ha quedado que Zapatero no sabía a qué precio se sirve el café en los bares y tabernas del país. Del segundo leo que Rajoy no respondió a la pregunta sobre su sueldo.

No estoy en contra de estos interrogatorios. Pero me inclino por los debates, por las reflexiones tranquilas, por las respuestas pensadas. Si no me interesa alimentarme en las áreas de descanso de las autopistas o en los fast food de la esquina, tampoco me apetece observar como quienes defienden los intereses de todos den respuestas precipitadas a cuestiones del máximo interés general.

Ví sólo un programa de 59 segundos, otra invención del pensamiento rápido, en el que sólo se exige al preguntado un titular. No hay matices ni sutilezas. Se le pide un pelotazo, si puede destruir al adversario, mejor, una bolea que deje descolocado al personal.

Vivimos tiempos de simplificaciones, de frases hechas, de pensamiento expresado en un mensaje de móvil. Podemos llegar a saber muchas cosas pero ignorar lo que está pasando.

No me quejo. Es lo que hay y con ello hay que pechar. Pero prefiero los debates a los interrogatorios que tienen un aire de atestado de la guardia civil. Si perdemos el hábito de razonar, de marcar los claros y oscuros, de no limitarnos al blanco y negro, acabaremos todos gritando y llegaremos a las manos.

Ya sé que lo que digo es políticamente incorrecto. Pero detesto tanto la comida rápida como el pensamiento rápido. Un diputado de la República le decía a su oponente: usted ha leído muchos diarios, pero muy pocos libros. Pues eso.

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Sr Foix: Yo lo intenté,pero no pude aguantarlos.Como Vd dice, no hay matices ni réplicas..un aburrimiento.No se perdió nada, créame.Un saludo

BartolomeC dijo...

Sr.Foix: Debo ser uno de esos millones de ciudadanos que quedaron contabilizados como audiencia al hacer zapping en los tiempos muertos del Barça-Penya, aunque visto lo visto me hubiera gustado hacerles una pregunta a Rajoy y Zapatero, ¿ para qué nos hacen perder el tiempo preguntandoles nada si Vds ignoran las respuestas...?, o lo que es lo mismo,¿ cuantos cafés se pueden comprar con su sueldo...?

Bombillita dijo...

No creo que sea del todo políticamente incorrecto. Ciertamente reflexiones tranquilas y respuestas pensadas, las del pleno de Congreso, o las Comisiones de Investigación.

¿No sucede esto cuando gente mediocre se hacen políticos de profesión?

Brian dijo...

El de Zapatero tampoco lo ví. El de Rajoy lo ví diez minutos y pillé justo el momento de la pregunta del sueldo; y vaticiné -no hacía falta ser ningún pitoniso- que eso sería lo quedaría del interrogatorio. Así que, malhumorado, le dije a mi mujer: "me voy al ordenador; si lo que más preocupa al país, es el sueldo del jefe de la oposición y lo que le cuesta un café al Presidente del Gobierno, por mí le pueden dar dos dos duros a Rajoy al Presidente y al país".

Bueno, de vez en cuando -y en la intimidad- uno se puede permitir estos desfogues, ¿no les parece?. ;-)

Anónimo dijo...

Sí Brian, que les den dos duros, pero que nos den la vuelta y no se queden el cambio, realmente lo que dice Bartolomé es cierto, llevar las respuestas preparadas es no saber las respuestas, sólo les faltaba llevar chuletas, claro que de no ser así qué otra cosa pueden ofrecer?.


J.Vilá.

SithWolf dijo...

Discrepo con lo del programa de "59 segundos". Está muy bien, y su fórmula permite que aquello no se convierta en un gallinero (además es mi programa de humor favorito!!!).

No hay nada que hacer... pronto aprendí que el que más grita es el que tiene la razón; y yo, miserable de mi, sufro afonía crónica.

Isarn

BartolomeC dijo...

@J.Vilá. Tan sólo un inciso, por qué en lugar de que seamos nosotros quienes les preguntamos y ellos responden, no son ellos quienes nos preguntan y nosotros quienes les decimos la solución, así la señora que malvive con 300 € al mes les diría como lo hace, el pensionista que lo hace con 500 € también, etc, etc.

Anónimo dijo...

///ENRIC///



Yo si vi casi enteros los dos programas, comparto la opinión de quienes creen que no dieron respuestas satisfactorias, más bien soltaron su discurso bien aprendido y memorizado, a veces eran respuestas mecanicas sin alma, sin venir a cuento, había que decir lo que tenian preparado cuanto antes y lo decían, es seguro que las personas del plató les habrían dado más y mejores respuestas, es seguro que habrían aprendido más escuchando que hablando.

Anónimo dijo...

Lluís, la política se está simplificando demasiado y una de dos, o los políticos son unos simples, o piensan que los simples somos los ciudadanos.

Anónimo dijo...

///ENRIC///



Los políticos son simples por creernos simples y nosotros somos simples por permitirles tratarnos como a simples.

Anónimo dijo...

@Anónimo:Ambas cosas !

Anónimo dijo...

Estos políticos de ahora ni siquiera leen diarios, les pasan recortes de prensa con lo que tienen que saber cada día y una hoja con las cosas que han de decir, todo masticadito.




Roger Mateu/Girona.

Ivan dijo...

Pues yo defiendo estos programas. Del programa de Lorenzo Milá, debe tenerse en cuenta que es la primera experiencia de este tipo que se hace en España. Se peca (por todos lados) de inexperiencia y es normal que el resultado no esté a la altura de las expectativas.
¿Porqué tiene tanto éxito esta fórmula y no la de la entrevista realizada por sesudos periodistas?
Porque los ciudadanos están hartos de la gran distancia que hay entre la clase política y la gran mayoría de la población. Es probable que una entrevista realizada por gente como Javier Pradera, Antonio Franco, Pedro J. Ramírez o Luís del Olmo hubiese generado más alimento para los artículistas del día después, pero el españolito de calle hubiese dicho: "hablaban de sus cosas".
Y a la mayoría de personas que te puedes cruzar por la calle le importan bien poco muchos temas que acaparan titulares en los medios, como si un político mintió hace ya tres años (¡los que han mentido desde entonces!) o si un tipo que ha pasado veinte años entre rejas debe cumplir uno o dos más.
Al final, todos somos iguales: ¿qué hay de lo mío? Y, para la mayoría de la población, "lo mío" es que la hipoteca es una losa, el cole de los críos está fatal, este año tampoco me subirán el sueldo y cada vez me cuesta más el café con los amigotes.
Saludos.

Anónimo dijo...

@Ivan:Creo que la distancia no se ha acortado por el mero hecho de hacer 1(UNA!)pregunta.Otra cosa sería si se pudiera replicar cuando el político no responde a lo preguntado.No sería más sensato que fuera el político el que preguntara cómo se apañan para llegar a fin de mes con su paga? O qué les preocupa de la situación actual?.Un saludo

Ivan dijo...

@ africa:
Tienes razón, una flor no hace primavera. Pero es un síntoma.

Saludos.