jueves, abril 27, 2006

Capitalismo sin frenos

El capitalismo desbocado fue denunciado por Carlos Marx, mucho antes de que la crisis de 1929 hiciera caer en dos años a casi todos los gobiernos del mundo. El diagnóstico de Marx erró en lo fundamental. Pensaba que la historia la conducen los hechos y no los hombres. En nombre del hombre nuevo se acabó haciendo insufrible la misma vida de los hombres.

Vivimos tiempos de expansión. La globalización transporta a los últimos rincones del planeta bienes, capitales y conocimiento. El crecimiento global en los últimos tres años ha sido de un cinco por ciento consolidado. Millones de humanos están saliendo cada año de la miseria y la desesperación.

No hay motivos de preocupación. Pero quiero resumirles unas declaraciones del profesor Kenneth Rogoff, ahora en Harvard pero antes de Princeton y Berkeley. Ha trabajado para el Fondo Monetario Internacional y es un hombre respetado en los ambientes académicos americanos.

Dice Rogoff que en los últimos veinte años ha habido un declive gradual en los asalariados del mundo desarrollado. Los ricos lo son cada vez más pero los que no están en el club de los poderosos no mejoran en la misma proporción.

Marx no tenía razón. Los asalariados no son explotados y el movilidad laboral es extraordinaria. Pero si su participación en el crecimiento nacional no aumenta, podemos encontrarnos en una situación de tensiones sociales que afecten a todo el mundo.

Los ejecutivos, los más listos, los que interpretan los signos de la economía pueden convertirse en multimillonarios en dos o tres operaciones. No se trata de crear riqueza sino de generar beneficios. Se dan muchos casos en los que un ejecutivo recibe cincuenta millones de dólares por despedir a cinco mil asalariados de una gran compañía. Es un héroe de la gestión dejando a miles de personas sin trabajo.

Pero esta actitud crea tensiones invisibles que transcurren en el subsuelo hasta que un día explotan en la superficie y se crea una crisis de dimensiones globales.

La tecnología y los expertos financieros son los dueños del momento. Pero si la tarta no es proporcionalmente distribuida podemos llegar a tener problemas muy serios. Al fin y al cabo, la política, no son sino intereses. Las democracias no pueden vivir sin crisis. El problema es cuando las recetas son imposibles. Podríamos estar en el principio de este momento que sería trágico para las libertades y para las democracias.

Roosevelt entendió las consecuencias de aquella crisis de 1929. Y puso un remedio que resultó providencial. Ahora no vemos las crisis. Pensamos que no existen. Error que se puede pagar muy caro, es decir, que puede afectar a millones de personas de todo el mundo.

13 comentarios:

BartolomeC dijo...

Sr.Foix: La noticia buena de hoy es que Berlusconi no ha impugnado el recuento de goles de la eliminatoria Barça-Milan,lo cual es de agradecer...
Ayer hablaba Vd de Eric Hobsbawm, un historiador judio que en su libro "Historia del siglo XX" ya acababa explicando algo de lo que nos explica hoy, " Nos hallamos en un momento sombrío de la Historia: una única superpotencia imponiendo su fuerza, retroceso de los derechos humanos y sociales hasta la época de Dickens y falta de un ideal que seguir", para terminar explicandonos que "nunca abandonemos las armas, ni siquiera en los momentos más difíciles. La injusticia social debe seguir siendo denunciada y combatida. El mundo no mejorará por sí solo".
En el mundo desarrollado los pobres son cada día más numerosos, el capitalismo salvaje no perdona, pero nuestra pobreza dista mucho de ser la del tercer mundo, hace poco escuché una contestación de un emigrante que sobrevivia en la zona de Almeria trabajando a destajo, "Sí, aquí se sufre, sufrimos mucho, pero en España se sufre mejor que en nuestro país...".
Es muy posible que el modelo se esté agotando, nos creemos millonarios por el valor millonario que atribuimos a nuestros pisos, pero probablemente somos cada día todos más pobres de lo que nos imaginamos.

Anónimo dijo...

///ENRIC///



Estamos instalados en la crisis, pero no somos capaces de verlo, llegamos a final de mes con el agua al cuello, si llegamos, la mitad del sueldo se lo lleva la hipoteca y la otra mitad el estado, es una situación imposible de explicar, si las cosas empeoran nos vamos a ver todos en la calle.

Anónimo dijo...

Lluis,De todos es sabido que Albert Einstein, tan conocido y a la vez desconocido popularmente, participó en las investigaciones y desarrollos referentes a la nueva energía que se aparecía en el horizonte, la energía nuclear. Él mismo, como portavoz de los investigadores, informó al presidente de los EEUU en esa época, Franklin D. Roosevelt, de las nuevas posibilidades energéticas derivadas de la fusión fisión en cadena de grandes masas de uranio, y también de las posibles aplicaciones de esta fusión en el campo armamentístico, que finalmente llevaría al desarrollo de la bomba atómica, o bomba A.

Anónimo dijo...

El mismo Einstein que condenó dichos usos bélicos y se afirmó socialista en aquel famoso escrito titulado "¿por qué socialismo?".

Todos el mundo académico lleva estudiando en los últimos años una nueva tendencia, denominada "la destrucción del mundo del trabajo", por el cual, la economía empieza a sostenerse casi exclusivamente en el capital financiero y ya no invierte en la creación de empleo, y el que existe, es precario y en estado de semi-esclavitud.

Como ya explicó el ex-presidente del gobierno español Felipe González (que creo que no es un comunista peligroso) "la tesis Neoliberal de los beneficios que se reparten de manera natural, como una jarra de agua que de tanto llenarse acaba por desbordarse, está muy bien sobre el papel, pero en la práctica no es así".

Como dijo Fukuyama hace poco, en esta nueva serie de rectificaciones publicas que el buen hombre está haciendo, descolgándose del Neoliberalismo, el mercado no funciona por si solo pero puede funcionar, y para ello necesita normas claras, o lo que es lo mismo, elementos correctores.

El mercado lo hacen funcionar los hombres, de manera consciente, es decir, que la tesis de la mano invisible se ha derrumbado por si sola (como venimos sosteniendo muchos desde hace tiempo).

Algunos de estos elementos correctores son las normas que rigen el mercado laboral, salario mínimo, sindicatos y derechos laborales, entre otros.

Anónimo dijo...

Josep Vilá.-


La tarta no se va a repartir jamás, las grandes empresas ganan más dinero que nunca y sus dividendos son cada día que pasa más y más superiores.


Esta tarta no se ha fabricado para ser compartida.


Los ejecutivos que despiden a miles de trabajadores tarde o temprano son despedidos por otro ejecutivo más agresivo que acaba con ellos.


Es la ley de la selva.


Coincido en lo que dice Bartolomé sobre la pobreza, aquí cada día hay más pobres que sufren.


Yo cuando sea pobre preferiré sufrir en el primer mundo que en el tercero.

Anónimo dijo...

En la selva no especulan con los recursos, consumen solo lo que necesitan, y cuando las leonas consumen su trozo de venado, dejan que los demas puedan comer también.

Ojala redistribuyeramos como hacen los animales.

Anónimo dijo...

Jean Marc:

Yo llevo teimpo diciendo que nuestro país no se ha preparado para la competencia que le viene del este. Países más avispados que nosotros y que aún gozando de salarios más interesantes para las multinacionales europeas tipo VW, BASF, etc. emplean inteligentemente los pocos fondos de cohesión que se les proporciona invirtiendo en tecnología. Nosotros hemos preferido construir. Ahora VW dice que no interesamos y puede desaparecer SEATcomo lo hará Nissan en breve de Barcelona. Nos venderan sus motores más caros y nos situarán en números rojos pese que en Alemania los sueldos están por las nubes. Los países acumulan capitales y llega un momento con su moneda fuerte que prefieren cederlos a cambio de mano de obra barata, hasta que esos países han acumulado reservas y ya no son interesantes. Mucho movimiento de capitales, de empresas que deben presentar cuentas con mínimo un 20% de beneficio a sus accionistas que no conocen patria, amigos y familia cuando se trata de dinero. Y así se abandonando países como conchas vacías, y se compromete la
estabilidad social. No sé qué le ven a ir de susto en susto.

Anónimo dijo...

Efectivamente, esa es la clave, un cambio de cultura empresarial.

Es necesario que los grandes y medianos empresarios en España se comprometan a invertir más en desarrollar nuevos productos, para aumentar la productividad y la creación de empleo.

Anónimo dijo...

Capitalismo STOP Fallos en 1929 STOP Supuesto fin del liberalismo STOP Vuelve a renacer de sus propias cenizas STOP

Experimento comunista de 1917 STOP Fallos durante 80 años STOP Cae en 1989 STOP No renace ni con respiración asistida STOP COMUNISMO = R.I.P. STOP

Anónimo dijo...

"Roosevelt entendió las consecuencias de aquella crisis de 1929. Y puso un remedio que resultó providencial"
Vale la pena reseñar que la economia estadounidense se recuperó A PESAR del New Deal, que fue una política intervencionista que no hizo mas que retrasar la salida de la crisis de 1929. En cuanto a como se llegó al crack de dicha crisis, la razón no puede ser más simple: el no dejar actuar a las fuerzas del mercado por sí solas y ceder a la estúpìda tentación tan típica de los políticos de intervenir en el mercado sin tener ni idea de como funciona. Los resultados de las políticas intervencionistas estan muy claras, todos los paises que la han practicado con un abuso ilimitado han ido a parar a las cloacas de la historia. Otros la practican a medias, y a medio camino del progreso se quedan. Lo más curioso de su discurso, estimado Sr.Foix, es que se queja del supuesto daño del liberalismo económico cuando en realidad éste no se practica al completo en ningún lugar del mundo. ¿Y si probáramos primero y criticáramos después?

Anónimo dijo...

"El mercado lo hacen funcionar los hombres, de manera consciente, es decir, que la tesis de la mano invisible se ha derrumbado por si sola (como venimos sosteniendo muchos desde hace tiempo)."
En respuesta al comentario anterior y copiando uno expuesto con acierto, desde mi punto de vista.
El hombre tiene la obligación de controlar todas las variables, incluido a sí mismo y en beneficio del hombre, entendiendo como tal al conjunto de la población, no unos cuantos.

Anónimo dijo...

¿Han visto ya el proyecto Postcapital en La Virreina?
Hablamos entonces, será interesante el debate

Anónimo dijo...

Jean Marc said:

No estoy de acuerdo. Ya cada son más las voces, incluído en EUA, de economistas liberales, que piensan que hay que poner límites al comercio, imponer reglas y hacer que el constribuyente muy rico se rasgue el bolsillo en beneficio del más desfavorecido. Los anyos en EUA en que había mucho menos comercio internacional fueron sus anyos dorados, fueron los anyos en que los ricos se rascaban los bolsillos y pagaban a la hacienda americana hasta el60% de lo que ganaban. Se cosntruían hospitales y las escuelas tenían un gran nivel que ahora paulatínamente van perdiendo. EUA entonces poseía el 50% de las reservas en oro y tenía una balanza en exportaciones positiva. Desde Reagan se han sumido en le déficit comercial y estatal y qué sacan de esto? Su industria se va a pique, se deslocaliza y acaba sucumbiendo ante los asiáticos, los japoneses antes y ahora los chinos. Ya no suponen apenas el 20% de la economía mundial, tienen un déficit comercial enorme y su economía se mantiene solo por el consumo y su endeudamiento creciente (doble déficit). Van de burbuja en burbuja y todos tememos que un día no tengan más remedio que devaluar su moneda brutalmente, arrastrando a medio mundo a una crisis sin precedentes. Aún así parece que siguen teniendo admiradores.