viernes, febrero 16, 2007

Tragedia humana en movimiento

Un barco de pesca destartalado, el Marine I, ha permanecido dos semanas en las costas de Mauritania con casi cuatrocientos pasajeros que intentaban alcanzar las islas Canarias camino de la península y de Europa.

La novedad de estos sobrantes humanos de la globalización es que no todos eran subsaharianos. La mayoría procedían de lejanas tierras como Sri Lanka, Pakistán, India y Afganistán. Con los vientos que soplan a favor, miles de fugitivos se atreven a embarcarse en una aventura incierta atravesando mares y continentes para llegar a las costas occidentales africanas y conseguir un pasadizo hacia Europa.

Es una tragedia humana en movimiento. Muchos no llevan ninguna carta de identidad. Después de las conversaciones entre Mauritaria y España para resolver la crisis, no se sabe dónde hay que trasladar a los inmigrantes que aspiran a tener la condición de refugiados políticos y no ser repatriados.

El gobierno español ha puesto aviones para transportarlos a sus lugares de origen. Pero no hay lugar de origen porque nadie lo sabe. Y los que lo saben, los interesados, no lo dicen. Mientras tanto peligra su salud, su supervivencia, se pueden consumir en playas o cobertizos infectos.

La Cruz Roja y otras organizaciones humanitarias piden auxilio para ayudar a esas gentes sin rumbo, sin identidad, sin reconocer la tierra de donde proceden. No porque renieguen de ella sino porque no quieren regresar. Saben que si alcanzan Europa podrán trabajar y enviar euros a los suyos.

El inmigrante no es un ser caprichoso. Huye para encontrar horizontes vitales más dignos. Una situación que iba a resolverse en cuestión de horas lleva ya cinco días estancada. Abandonaron su tierra pensando que con sólo llegar a Europa, a Estados Unidos también acuden pero son muchos millones los que viven como ilegales, encontrarían la tierra prometida y lo que encuentran es sacrificio, dolor, incomprensión y en muchos casos la muerte.

No es un problema de España, de Francia o de Alemania. Es un problema de desequilibrios internacionales, de riqueza mal distribuida, de políticas que han mirado a las naciones subdesarrolladas como tierra de conquista.

En los siglos XIX y XX se arrancaron muchos recursos naturales de las colonias. Ahora nos entregan sus hombres y mujeres más preparados, jóvenes, arriesgados, capaces de hacer todos los sacrificios para romper el círculo de la miseria que les envuelve.

No quiero hacer demagogia. Pero si una parte de los gastos en armas en todo tipo de guerras se desviaran hacia los países más pobres, posiblemente la situación no sería tan dramática y tan indecente por los gobiernos y las sociedades de acogida.

Ellos sufren física y humanamente. Nosotros tenemos nuestros principios éticos almacenados no sé dónde.

10 comentarios:

BartolomeC dijo...

Sr.Foix: El 23 de diciembre de 1862 una flotilla mandada por el Capitán Juan Maristany compuesta por la barca española "Rosa y Carmen" y varias goletas, barcas y bergantines peruanos, iniciaron una incursión en la Isla de Pascua; después de incendiar y quemar las viviendas y plantaciones de los isleños, mataron a muchos de ellos y capturaron casi cuatrocientos nativos como esclavos, para llevarlos posteriormente al puerto de El Callao para su venta, la Isla de Pascua no volvió a recuperarse de ese golpe.
Juan Maristany y su barca "Rosa y Carmen" tenian su puerto base en El Masnou, Maristany trabajó durante años en el negocio del comercio de esclavos, los pobladores del Maresme sabian que llegaba el capitan Maristany por el hedor que emanaba su barca antes de verse su silueta en el horizonte, hedor que traia el viento de Garbí dominante en la zona.
Si el capitán esclavista Juan Maristany viera ahora la cantidad de africanos, magrebies, peruanos y personas de otras nacionalidades que hay en la zona de El Masnou y Premia, trabajando en duras, durisimas condiciones, pensaría que el tiempo se ha detenido y que nada ha cambiado desde la época en la que él vivió, con la única diferencia que a los esclavos ya no hace falta ir a buscarlos, vienen ellos a ofrecerse a trabajar en lo que sea y en las condiciones que sean.

Anónimo dijo...

¡Joder¡ y con perdón, Bartolomec. De donde le sale tanto conocimiento. Espero retirarme para desempolvar mi maltrecha biblioteca y darle "castaña". Es que, cualquier tema hace que los “comentaristas” nos quedemos en pelota picada (perdón por la expresión machista). Pero siga¡ Es bueno conocer de quien sabe. Pero discrepo de que los esclavos desembarcados en El Callao, puedan equipararse a los negros del Maresma. Estos, no trabajan "tan duro" ni viven tan mal. Muchos andaluces, al llegar a Catalunya hubieran deseado encontrar lo que los negros tienen en el Maresma. Soy catalán, pero vagamente recuerdo la existencia de muchos andaluces o gallegos cuando llegaron a nuestra tierra.
En cualquier caso, no hay mucha diferencia entre un esclavo romano y un trabajador de la Seat, salvando las distancias.
A mi entender, y lo lamento, el Sr. Foix está haciendo un poco de demagogia. India y Pakistán son ya potencias atómicas. Ese pequeño esfuerzo de inversión bélica podría aplicarlo a sus ciudadanos. No hablemos ya de los sirvenguenzas africanos ya que las ayudas internacionales recaen en sus bolsillos, al tiempo que ciertos países Occidentales fabricaron y vendieron cientos de miles de minas personales.
Sr. Foix, esta es una cuestión de hipocresía mundial, que avergüenza a “la persona” pero deja inmunes a Estados y ciertas empresas. No sé. Este es un asunto que siempre me deja bastante descolgado, ya que si lo trato de un determinado modo, quedo como un libertario y si lo trato de otra forma como un despreciable capitalista.
Posiblemente Vd. está ya en la época de que poco importa lo que digan y desea que su verdad, que es real, salga a la palestra. Yo aún conservo, algunos días, las formas. Pero como Vd, escribió, no hace mucho tiempo el gran político Disraeli decía, más o menos, “un poco de verdad es buena, toda la verdad es insoportable”

Anónimo dijo...

///ENRIC///



Estoy con Foix en que vivimos una tragedia humana en movimiento, el apunte histórico de nuestro compañero Bartolomé es demoledor y le agradezco el trabajo de ponerlo en nuestro conocimiento, la esclavitud con nuevas formas y nueva cara se ha instalado entre nosotros, antes era un negocio externo y ahora lo vivimos en casa, por más que nos duela reconocerlo.
Las condiciones de los trabajadores ilegales en España es bastante próxima a la esclavitud, carecen de derechos laborales, sanitarios o sociales, son despedidos cuando y como quieren, no cobran lo estipulado muchas veces, se alojan en barracones o en pisos pateras, malviven, son engañados.
Hay muchas formas de esclavitud actalmente, trabajar doce horas en naves cosiendo miles y miles de piezas para la industria textil es una de ellas, de eso los chinos establecidos en nuestro país saben mucho, el problema es que no queremos ver el rpoblema, preferimos mirar para otro lado y hacer ver que esta esclavitud no existe, cuando sufren injusticias no son denunciadas por temor a su situación ilegal, todo ello sin hablar de la esclavitud infantil, de los niños que son obligados a trabajar pidiendo en las calles o en los semáforos, si eso no es esclavitud, qué nombre le ponemos?.

´´ dijo...

vaya yo tengo un amigo de apellido Maristany y que reside en el Masnou ya le comentare , la memoria historica caera sobre el .

Sobre el tema , la desigualdad es mucha pero los gobiernos africanos son un embudo importante , es complicado pues existe la autonomia de los estados por un lado y las dictaduras y mafias por otro , no puedes intervenir .

Anónimo dijo...

Ese es el problema que apunta Foix, hoy como ayer, nadie quiere aceptar la realidad de lo que está pasando. En la época de la esclavitud el negocio se veia como algo normal, nadie le daba importancia, era una forma como otra cualquiera de ganarse la vida, hoy vemos situaciones del mismo calibre y pensamos que no será para tanto, no es nuestro problema, tan sólo personas como Foix denuncian la situación. La comparación que nos pone Bartolomé es sangrante por su inmediatez y cercanía, yo cada día veo filas de trabajadores esperando por las mañanas ser contratados en las cunetas de la N-II, el que no quiera verlo que no lo vea, pero el problema lo tenemos aquí mismo.




J.Vilá.

Anónimo dijo...

Sr Foix:Realmente es difícil no hacer demagogia, pero comparto con Vd el gasto inútil en armamento y en mil cosas más.Yo creo que si se invirtiera en el tercer mundo no haría falta emigrar.Salen de un país pobre pero que es el suyo, con su gente, sus paisajes y sus costumbres y llegan a un mundo que imaginaba feliz y que les es, habitualmente, hostil y complicado.
En cuanto a la esclavitud, por desgracia, también detectamos emigrantes negreros que abusa de sus conciudadanos. Es la ley del más fuerte. Y, si, miramos para otro lado, es una situación incómoda. Un saludo

Anónimo dijo...

Lluís, la odisea de los policias españoles trasladados a Mauritania pone los pelos de punta, cien policias enviados de forma precipitada e improvisada que han sido dejados a su suerte en un país que no respeta los derechos humanos mínimos de los emigrantes que llegan a sus fronteras, una historia para no dormir.
Había leido algo sobre los esclavos de la isla de Pascua, pero no sabía que el causante partía de El Masnou, tu Blog es una caja de sorpresas agradables.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con Foix, la ética brilla por su ausencia, los gobiernos no se mueven por éticas precisamente.

La juventud que viene de todos esos paises para ser explotados en trabajos muchas veces miserables no volverá nunca al sitio de partida, todo su esfuerzo quedará en nada y servirá de poco si en sus paises no se trabaja por crear las infraestructuras necesarias para su desarrollo y eso es algo que no está ocurriendo.

Los Estados Unidos necesitaron años de esclavitud para poder generar el gran país que son ahora y la Unión Europea ha decidido hacer lo mismo y traer el máximo de mano de obra barata para generar mayores beneficios en sus empresas, o eso o depender de paises como China, India o Pakistán para montar sus industrias de consumo a precios ridículos.

Por Girona también tenemos emigrantes que esperan en las carreteras para ser contratados de buena mañana y que duermen en pisos pateras, en las llamadas camas calientes, sin que a nadie se le caiga la cara de vergüenza.



Roger Mateu/Girona.


PD.- Bartolomé, sigue subiendo el listón que a mi me encanta entrar en un Blog sabiendo que encontraré cosas interesantes.
Saludos.

Anónimo dijo...

Aplaudo la valentia de Lluís Foix de denunciar la situación en la que están estos emigrantes, es más fácil mirar hacia otro lado y hablar de otros temas menos comprometidos.


E.Dalmau(Barcelona)

Anónimo dijo...

Aplaudo la valentia de Lluís Foix de denunciar la situación en la que están estos emigrantes, es más fácil mirar hacia otro lado y hablar de otros temas menos comprometidos.


E.Dalmau(Barcelona)