martes, febrero 06, 2007

Compadreo entre jueces, políticos y periodistas

Cómo me gustaría que los jueces fueran personajes anónimos, cubiertos con una peluca dieciochesca, discretos, que hablaran por sus autos y sentencias y no por sus declaraciones públicas.
El presidente Roosevelt no pudo llevar a cabo todas las reformas del New Deal porque el Tribunal Supremo era claramente republicano y conservador. Cada presidente designa a los jueces que causan baja o mueren. Es el sistema el que así lo ha previsto. Todavía hoy los jueces nombrados por Ronald Reagan pesan sobre la máxima autoridad judicial del país.
Aquí en España se decidió que tanto el Consejo General del Poder Judicial como el Tribunal Constitucional estuviera compuesto por magistrados nombrados por los grupos parlamentarios. Y así la política se desliza en las máximas autoridades judiciales del Estado.
Lo que me inquieta más de la recusación del magistrado Pérez Mestre es que puede parecer selectiva. Otros magistrados que han intervenido directamente en la discusión de leyes siendo diputados no fueron recusados.
El hecho de que el Estatuto de Catalunya haya sido recurrido por el Partido Popular, por el Defensor del Pueblo y por cinco comunidades autónomas controladas por el PP demuestra que el texto aprobado por referéndum en Catalunya siguiendo todas los pasos jurídicos reglamentarios, este Estatuto no gusta a los conservadores.
Lo puedo entender y tienen todo el derecho para impugnarlo. No faltaría más. Lo que aumenta mi inquietud es que el Estatuto de Andalucía contiene artículos muy parecidos a los que se aprobaron en el catalán y nadie ha abierto la boca. Lo mismo ocurre con algunos artículos del Estatuto valenciano.
La deducción lógica es que lo que molesta no es la constitucionalidad de los textos estatutarios sino lo que molesta es el Estatuto de Catalunya.
Otra consideración. ¿Qué hacía hace unos días el presidente Zapatero siendo entrevistado ante varios centenares de personas por el inefable juez Garzón?
Una de las causas de los problemas que padecemos es la complicidad, camaradería o compadreo entre políticos, jueces y periodistas. Es un mal síntoma para el correcto funcionamiento del estado de derecho.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

La division de poderes es minima , quien manda en el partido que manda es quien manda . Domina tu partido y si ganas las elecciones dominaras el gobierno , el parlamento tambien a poca mayoria que tengas y los jueces , los jueces son lo menos idependiente que hay .

El tribunal constitucional es un tribunal politico , la interpretacion es siempre politica .

BartolomeC dijo...

Sr.Foix: Cuando a un periodista su madre le dice que le ama y que es el mejor del mundo, lo primero que tiene que hacer es verificar la noticia. Pero por una extraña razón, si el que se lo dice es el primer ministro del país, entonces el periodista se convierte en el alter ego del político y la cosa se complica horrores.
La separación entre poderes legislativos, ejecutivos y judiciales, tendría que empezar por los restaurantes, que no deberian permitir comer juntos a los tres...

Anónimo dijo...

Si los restaurantes prohiben comer juntos a jueces, parlamentarios y gobernantes, se les acaba el negocio y tienen que cerrar, aunque reconozco que el restaurante es el principio de todo el compadreo que tenemos.
Este compadreo que nos dice Foix que se traen entre manos o entre platos y tenedores nuestros poderes puede ser el final de la credibilidad que tenemos en las instituciones, si no se rectifica y se pone remedio a la situación veo peligrar la democrácia que tanto nos ha costado y por la que hemos luchado tantos años.



J.Vilá.

Anónimo dijo...

Sr. Foix.
Lo escribía ayer: PP y PSOE son dos caras de la misma moneda. Su concepto de la ideología de España es la misma, como en el pasado lo fueron núcleos de poder que entendieron abolidos los Decretos de Nueva Planta y con ellos las Constitucions Catalanes y los Furs de València.
Sobre las cenizas de un Estado de Derecho (La II República) nace una dictadura convertida en “Estado de Derecho” y sobre éste la transición, que obliga a cambiar viejos juramentos que alcanzan hasta la propia monarquía y todo para seguir justificando un “Estado de Derecho” cuyos núcleos de poder en la judicatura del antiguo régimen aún siguen presentes en ella.
En definitiva el “Manifest Destiny” a la española, sigue hoy tan vivo como en el pasado sin haber conseguido dominar a las naciones sojuzgadas de la península.
¿Hasta cuando seguiremos en esta permanente falsedad del Estado de Derecho? ¿Que se puede esperar de este cambalache? Por derecho de conquista” jamás puede construirse un Estado de Derecho.
Si alguien considera lo anterior una exageración, que analice lo que están haciendo los jueces con el Estatut.

Anónimo dijo...

///ENRIC///



Francesc, el error ha sido creerse que el Estatut resolvería los problemas pendientes, el Estatut ha sido un cambalache, una tomadura de pelo en la que nos hemos creido lo que se nos prometia, el resultado ha sido que los partidos nacionalistas se han quedado fuera de juego y sin opciones, mientras que Zapatero ha conseguido limpiar de enemigos su frontera con Catalunya.
Sobre el compadreo de jueces, políticos y periodistas, me remito al humor cáustico de Bartolomé, genial de veras.

Anónimo dijo...

La entrevista de Garzón a Zapatero no tardaremos en saber su resultado.

Anónimo dijo...

Para acabar de flipar en colores sólo faltaba Saura defendiendo la legalización de todas las drogas.



Roger Mateu/Girona

Anónimo dijo...

roger

legalización de drogas ? no!!! que las grabarian con mil impuestos y serian carisimas , eso que no lo toquen .

Anónimo dijo...

Francis, siempre he querido tener una drogueria, no me quites la ilusión.



Roger Mateu/Girona.

Anónimo dijo...

Legalización de drogas, defensa de la okupación, declaración de antisistema, buen rollo en las detenciones, estoy seguro que en las próximas elecciones Saura y Mayol arrasan.-Albert-