jueves, febrero 24, 2005

Un tres por ciento no explicado

Lo ha dicho Maragall. CiU tiene un problema y este problema se llama tres por ciento. La insinuación fue recogida con vehemencia por Mas que le pidió que la retirara. Y Maragall la retiró por el bien del Estatut y de Catalunya. Tirar la piedra y esconder la mano no se puede hacer en el Parlament y ante las cámaras de televisión. La piedra ha empezado a rodar y baja por la pendiente. Muchos catalanes se preguntan ahora: ¿qué es eso del tres por ciento? Y lo querrán saber. Y habrá que probar quién lo recibió y quien lo entregó. Sobre silencios cómplices no se puede construir el futuro. Y si no fuera cierto, Maragall tendrá que sacar las consecuencias por haber hecho insinuaciones falsas.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

El hundimiento del túnel del Carmel ha abierto una crisis de confianza entre los ciudadanos y los dirigentes políticos, pero si no se explica claramente y hasta sus últimas consecuencias esta alusión al "tres por ciento" y se nos garantiza que el silencio de la verdad sobre este tema no sera moneda de cambio en el compadreo político, entonces la crisis de confianza será entre los ciudadanos y el sistema democrático.

Bartolomé C.

Anónimo dijo...

Desde hace un par de años he sido bastante crítico con CIU pero la alusión que ha hecho el Sr. Maragall en el Parlament me ha parecido totalmente indigna del cargo de President. Si es cierto que CIU cobró comisiones que el Sr. Maragall entregue la documentación que lo demuestra en el Parlament y después en el Juzgado. Mientras que se calle y gestione la crisis porque bastante complicada está la situación.
Me temo que el quit de la cuestión es que ambos partidos tienen muchos asuntos turbios que ocultar y tienen una especie de pacto "hoy por ti y mañana por mi". Pero hoy al Sr. Maragall se le ha escapado.

Sergio Brosa dijo...

A estas alturas del juego, es bien conocido que el grueso de la financiación de los partidos sale de las adjudicaciones de las obras públicas. Es por ello que los propios partidos no quieren una ley de financiación transparente, pues prefieren la opacidad del chalaneo y el cambalache que suponen las dicotomías (como llaman los médicos a las comisiones de otros médicos) en las adjudicaciones. Pero de eso a sacarlo a relucir en plena sesión, es abrir una caja de Pandora que produce bochorno a los que, con nuestros votos, hemos situado en el Parlament a esas personas (eufemismo).

¿Cómo se ha permitido Maragall una cosa así? Lo hubiéramos esperado de cualquier otro, pero a Maragall le teníamos como un político de rancio abolengo. Su actuación nos lleva a recordar su salida del ayuntamiento de Barcelona, a media legislatura y por una rabieta. Uno que se precie no puede perder los papeles de esa forma. Las consecuencias van a ser muy graves, pero para toda la ciudadanía de Cataluña, pues al fin y al cabo, para los políticos, una cosa así está contenida en el sueldo oficial.

Anónimo dijo...

Cada vegada resulta més llastimós escoltar els nostres polítics. Al meu poble també hi ha hagut acusacions de frau i no em cansaré mai de dir que, si hi ha indicis de mala gestió i engany, s'ha d'anar a fons per trobar el delicte i fer pagar la culpa, però si no hi ha proves, no es poden fer acusacions a la lleugera i per tant s'han d'assumir els errors d'estratègia.
Amb aquest comportament, els ciutadans no confiarem mai en els polítics, perquè sempre tindrem present el dubte i la suspita.

Xavier Febrer
xfebrer.blogspot.com

Anónimo dijo...

Hace tiempo que se le ve a Maragall un inquietante tic: dice lo primero que le viene a la mente sin pararse a pensar en las consecuencias. No es la primera vez que la suelta según le viene. Lo malo es que ahora no es el líder del partido de la oposición sino alguien con responsabilidades institucionales.

Esas elecciones anticipadas: cada vez más cerca.

Anónimo dijo...

Yo no sé si CiU tenía un problema llamado 3%, pero de lo que no hay duda es de que ahora tenemos, todos, un buen problema. (Y lo malo es que no podemos llamar a Huston para que nos ayude). Esta "maragallada" será de las que hacen época.

Brian

Anónimo dijo...

Muchos catalanes se preguntan ahora: ¿qué es eso del tres por ciento? Y lo querrán saber. Y habrá que probar quién lo recibió y quien lo entregó.

¿Quiere eso decir que vamos a ver periodismo de investigación en los próximos días? Los políticos tienen muchas responsabilidades en lo que está pasando, pero no son los únicos.

Anónimo dijo...

Amigo Foix, tú sabes perfectamente que es el 3%. O las ayudas a La Vanguardia.

Te recomiendo una lectura "El oasis catalán, a tomar por el culo"

http://juancatalan.blogspot.com/